Probad y Ved 9 | Sábado 30 de Noviembre 2013 | «El hijo pródigo»

Daniel Lima Neri nació en la Iglesia Adventista, donde permaneció hasta los veinte años. Luego terminó desviándose de los caminos del Señor, pero profesionalmente se estableció como un representante comercial de mucho éxito. Ganaba mucho dinero pero sentía que eso no lo satisfacía. Un día perdió todo y su vida cambió completamente.

Cierta mañana de sábado, la esposa de Daniel, que no era adventista, le recordó de la iglesia y le dijo que tal vez ese era de momento de volver a buscar a Dios. Al sábado siguiente, él fue a la iglesia y encontró a la madre sentada en el lugar de siempre. Participó de una semana de oración y no salió más de la iglesia. Poco tiempo después, se bautizó delante de toda la familia.

Luego de dejar el negocio de los inmuebles, Daniel se quedó sin trabajo y sin rumbo. Llegó a trabajar con un amigo, dueño de una farmacia, pero necesitaba algo fijo y oró a Dios sobre el asunto. Al poco tiempo, otro amigo le ofreció una oportunidad de trabajar con ventas y él aceptó. Le fue muy bien con eso y logró poner al día el alquiler y las cuotas del carro. Hizo una promesa a Dios de dar el 50% de todo lo que recibiese. La esposa también recibía un sueldo y devolvía fielmente diezmos y ofrendas.

Muchas fueron las bendiciones que el matrimonio recibió, entre ellas, dos empresas y un depósito. Ellos sienten que cuando desterramos el egoísmo y orgullo del corazón, Dios encuentra espacio para trabajar.

Adoremos ahora al Señor con los diezmos y las ofrendas, demostrando reconocimiento y gratitud

Unión Noroeste Brasileña
Daniel Lima Neri
IASD Cidade de Deus