10 Adventistas Muertos en la Masacre de Kenia

Al menos 10 adventistas del Séptimo Día estaban entre las 148 personas asesinadas cuando cuatro militantes islamistas irrumpieron en una universidad de Kenia la semana pasada en un ataque contra los cristianos, dijeron los líderes de la iglesia el miércoles.

Entre los muertos esta Eric Nyumbuto, líder de la Iglesia Adventista dirigida por los estudiantes en el campus de Garissa University College, una escuela pública en el noreste de Kenia.

«Las palabras no pueden describir lo horrible que fue experimentar este evento», dijo Philmon Okal, uno de los primeros agentes de policía en responder al ataque.

«Pero este ataque me recuerda que la segunda venida de Jesús está muy cerca», dijo Okal. «Tenemos que seguir buscando ese día cuando la violencia, la muerte y la destrucción no será más.»

Al-Shabab, un grupo militante vinculado a Al Qaeda fundado en la vecina Somalia, ha reclamado la responsabilidad del ataque, el Jueves 2 de abril. El grupo, que dice que quiere «liberar las tierras musulmanas de la ocupación», ha levado a cabo otros atentados contra los cristianos, pero ninguno tan brutal como el de la semana pasada.

Stanley Rotich, un miembro de la Iglesia Adventista Garrissa, dijo que estaba en un edificio cercano cuando escuchó disparos. De inmediato llamó Nyumbuto, el líder estudiantil adventista, por teléfono celular. La conversación terminó abruptamente cuando se desconectó el teléfono.

Más tarde se enteró de la muerte de su amigo.

Cerca de 600 estudiantes lograron huir de la escuela durante el asalto que duró horas, y alrededor de 80 resultaron heridos, algunos de gravedad.

El presidente de Kenia se ha comprometido a llevar a los atacantes a la justicia y ordeno ataques con bombas contra al-Shabab en Somalia. Los investigadores han detenido a cinco sospechosos bajo sospecha de suministrar armas a los atacantes.

La Iglesia Adventista del Séptimo Día el miércoles expresó sus condolencias a los seres queridos de los fallecidos y dijo que lloró con ellos.

Los miembros de la iglesia de Garissa, muchos de los cuales estaban familiarizados con los 10 estudiantes asesinados, dijeron estar «con el corazón roto.»

«Estamos desconsolados por esta pérdida sin sentido y solicitamos sus oraciones por todas las víctimas de esta terrible tragedia», dijo la iglesia en un comunicado.