El voto no será sobre la ordenación de las mujeres, mas si sobre la unidad de la iglesia mundial. ¿Será que la iglesia mundial va a permitir que cada división decida por si misma sobre las cuestiones vitales?
Si la mayoría de los delegados votan «SI» la iglesia va a ser fragmentada y creará un precedente para futuras decisiones vitales. No seremos mas una iglesia mundial con un conjunto de creencias.
Será precedente también para otros asuntos como la admisión de pastores homosexuales en la iglesia, de acuerdo con el ambiente político de cada división.
Si la mayoría vota «NO» la autoridad de la iglesia permanecerá en las manos del organismo mundial. La Iglesia Adventista del Séptimo Día fue creada por Dios y especialmente orientada con una misión especial: Preparar un mundo para la venida de Jesús y para que Dios pueda cumplir esa misión, Él debe tener un pueblo unido en todo el mundo.
La unidad es la oración de Jesús para su iglesia. Dividir y destruir es el deseo del enemigo. Dios va a intervenir, el va a intervenir para proteger su iglesia.
Pensamiento de hoy
- Elena G. White
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