Este tema de los bautismos inapropiados esta en contra de el manual de iglesia y del espíritu de profecía, veamos lo que dice el manual y el Espíritu de profecía:
(Manual de iglesia 2005 pág. 30)
Los pastores deben instruir cabalmente a los candidatos antes del bautismo. Ningún ministro debe presentar a candidato alguno para ser bautizado y ser miembro de la iglesia, hasta que dicho candidato pueda satisfacer a la iglesia, a través de un examen público, de que ha sido bien ins- truido y está listo para dar ese paso. (Véanse las pp. 30-34.)
La obra del ministro no está completa hasta que haya instruido cabalmente a los candidatos, y éstos estén familiarizados y comprometidos con todas las creencias fundamentales y con las prácticas de la iglesia relacionadas con las mismas, y estén preparados para asumir las responsabilidades de miembros de la iglesia. Las iglesias deben insistir en que se aplique este procedimiento como un principio guiador en la admisión de los nuevos miembros. Las iglesias, a través de sus juntas directivas, deben insistir en que los candidatos al bautismo sean instruidos individualmente, y, además, cuando ello sea posible, que sean adoctrinados en una clase bautismal.(cf).
“La prueba del discipulado no se aplica tan estrictamente como debiera ser aplicada a los que se presentan para el bautismo. Debe saberse si están simplemente tomando el nombre de adventistas del séptimo día, o si se colocan de parte del Señor, para salir del mundo y separarse de él y no tocar lo inmundo. Antes del bautismo, debe examinarse cabalmente la experiencia de los candidatos. Hágase este examen, no de una manera fría y manteniendo distancias, sino bondadosa y tiernamente, señalando a los nuevos conversos el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Hágase sentir a los candidatos para el bautismo los requerimientos del evange- lio” (Joyas de los testimonios, t. 2, p. 393). “Cuando den evidencia de que entienden plenamente su posición, han de ser aceptados” (Testimonios para los ministros, 1977, p. 128).
SIERVOS DE SATANÁS
Un punto débil de nuestra evangelización—
La llegada de miembros que no han sido renovados en su corazón y reformados en su vida, es una fuente de debilidad para la iglesia. Este hecho se ignora a menudo. Algunos pastores e iglesias están tan deseosos de obtener un aumento del número que no presentan un testimonio fiel contra los hábitos y prácticas no cristianos. A los que aceptan la verdad no se les enseña que no pueden ser mundanos en su conducta mientras son cristianos de nombre, y estar seguros. Hasta aquí han sido súbditos de Satanás. De aquí en adelante han de ser súbditos de Cristo. La vida debe dar testimonio de que han cambiado de guía. – {Ev 235.1}
La opinión pública favorece una profesión del cristianismo. Se requiere poca abnegación o sacrificio para adoptar una forma de piedad y para tener el nombre inscripto en el libro de la iglesia. Por lo tanto, muchos se unen a la iglesia sin llegar a estar previamente unidos con Cristo. En esto triunfa Satanás. Tales conversos son sus agentes más eficaces. Sirven como señuelo para otras almas. Son falsas luces, y tientan a los incautos induciéndolos a la perdición. Es en vano que los hombres traten de hacer la senda del cristiano amplia y agradable para los mundanos. Dios no ha alisado ni ensanchado el camino angosto y escarpado. Si hemos de entrar en la vida, debemos seguir la misma senda que Jesús y sus discípulos recorrieron: la senda de la humildad, de la abnegación y del sacrificio.—Testimonies for the Church 5:172 (1882). – {Ev 235.2}
Una advertencia a los evangelistas y los pastores—
Nuestros hermanos en el ministerio están fallando definidamente en hacer su obra según los métodos establecidos por el Señor. Fallan en presentar a cada hombre perfecto en Cristo Jesús. No han obtenido experiencia espiritual mediante la comunión personal con Dios, ni un verdadero conocimiento de lo que constituye el carácter cristiano; por lo tanto muchas personas son bautizadas sin estar en condición de recibir este rito sagrado, porque aún están unidas al yo y al mundo. No han visto a Cristo ni lo han recibido por fe.—The Review and Herald, 4 de febrero de 1890. – {Ev 234.5}
Se hace muy notable que hoy ya no ingresan los miembros a la iglesia con la instrucción adecuada como antes se acostumbraba. Nuevamente, se está creando una nueva generación de adventistas que ignoran los principio fundamentales de nuestra fe, formándose una iglesia que no podrá subsistir en el conflicto final. El Espíritu de profecía dejó muy en claro las condiciones para el ingreso de los nuevos miembros: “¿Cuál fue el origen de la gran apostasía? ¿Cómo empezó a apartarse la iglesia de la sencillez del Evangelio? -Conformándose a las prácticas del paganismo para facilitar a los paganos la aceptación del cristianismo…
“Para aumentar el número de los convertidos, se rebajó el alto nivel de la fe cristiana, y el resultado fue que «una ola de paganismo anegó la iglesia, trayendo consigo sus costumbres, sus prácticas y sus ídolos.» CS 435.
“Sólo cuando la Iglesia está compuesta de miembros puros y abnegados, puede cumplir el propósito de Dios. Demasiado trabajo apresurado se hace agregando los nombres al libro de la iglesia. Se ven serios defectos en el carácter de algunos que se unen en la iglesia. Aquellos que los admiten dicen, «primero los introduciremos en la iglesia, y luego los reformaremos».Pero esto es un error. La primerísima obra que debe hacerse es la obra de reforma. Oren con ellos, hablen con ellos, pero no les permitan unirse con el pueblo de Dios como miembros de iglesia hasta que den una evidencia decidida de que el Espíritu de Dios está trabajando en sus corazones.” RH.1901-05-21
“Dios preferiría que hubiese seis personas cabalmente convertidas a la verdad antes que sesenta que lo profesasen y no fuesen verdaderamente convertidas” (OE 383).
Hecho por Rafael Díaz
Pensamiento de hoy
- Elena G. White
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