Test: Conozca si el Reavivamiento y la Reforma ha sucedido en su Iglesia

¿El Reavivamiento ha sucedido en su iglesia? ¿En serio? ¿La Palabra de Dios ha sido predicada fielmente donde usted se congrega? ¿En su comunidad de creyentes el Espíritu de Dios ha acompañado el mensaje de sus siervos, y la Palabra se ha proclamado con poder? Um… ya veremos!

• Como pecadores, que existen en su congregación local, ¿sintieron un despertar de conciencia?
• La «luz verdadera que vino al mundo e ilumina a todos los hombres» (Juan 1: 9) ¿ilumino lo más recóndito del alma, y ​​las cosas malas que estaban escondidas salieron a la luz?
• ¿El corazón y el espíritu llegaron a poseer una profunda convicción?
• ¿Las personas estaban convencidas de pecado?
• ¿De justicia?
• ¿Y del juicio venidero?
• ¿Los participantes tienen ahora un sentido de la justicia de Jehová y sintieron el terror de estar, en su culpabilidad y la impureza, delante de Aquel que examina los corazones?
• ¿Ha visto los fieles angustiados exclamando: «¿Quién me librará de este cuerpo de muerte» (Romanos 7:24)?
• Cuando se reveló la cruz del calvario, con el pleno sacrificio por el pecado humano, ¿vieron que nada más que los méritos de Cristo podrían ser suficientes para expiar sus transgresiones, que sólo esos méritos podían reconciliar a la gente con Dios?
• ¿Así es que ustedes, miembros, con fe y humildad, llegaron a aceptar el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, es decir tuvieron realmente el «perdón de los pecados pasados» (Romanos 3:25) por la sangre Jesús?

Además, si usted quiere saber si hay también una Reforma en su iglesia, continúe respondiendo.

• Pues bien, si realmente creyeron, fueron bautizados, y se levantaron para caminar en novedad de vida como nuevas criaturas en Cristo Jesús, ¿los «reavivados» producieron frutos dignos de arrepentimiento?
• ¿Dejaron de conformase a los deseos que antes tenían, y por la fe en el Hijo de Dios siguieron sus pasos, comenzaron a reflejar su carácter y ser puros como él es puro?
• ¿Pasaron los miembros a amar las cosas que antes odiaban, y a odiar las cosas que antes amaban?
• ¿El orgulloso y presuntuoso se convirtió en manso y humilde de corazón?
• ¿El vanidoso y arrogante se convirtió en serio y accesible?
• ¿Los profanos se convirtieron en reverentes?
• ¿El borracho en sobrio?
• ¿Los fornicarios en puros?
• ¿Las modas vanas del mundo se dejaron de lado?
• Los cristianos han sustituido a la búsqueda del «adorno exterior, de peinados ostentosos, de adornos de joyería, de prendas de vestir» por la búsqueda de «el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.»(1 Pedro 3: 3-4)?

En fin…

• ¿El Proyecto de Reavivamiento y Reforma en su iglesia fue  un despertar que dio lugar a la humildad profunda, la reflexión y el examen del corazón y conducta?
• ¿Se caracterizó por solemnes y fervorosas apelaciones al pecador y por la tierna simpatía para con la adquisición hecha por la sangre de Cristo?
• ¿Los hombres y las mujeres oraron y lucharon con Dios para la salvación de los demás?
• ¿Los hermanos comenzaron a considerarse dignos de padecer y ser probados por el amor de Cristo?
• ¿Es notable una transformación en la vida de los que profesan el nombre de Jesús hasta el punto de que la sociedad llegar a ser beneficiada por su influencia?
• Es decir, si se juzga por sus frutos, ¿los miembros de su iglesia dan la impresión correcta de que están verdaderamente bendecidos por Dios para la salvación de las personas y la elevación de la humanidad?

Si usted tiene facilidad para responder a estas preguntas afirmativamente, por favor, invíteme para ir a su iglesia! Sí, quiero conocerla! Pero si se siente incómodo en dar a estas preguntas un simple «sí», yo podría podría aceptar la invitación, pero para otro propósito.

Por lo que es claro: el el reavivamiento y reforma no se pueden ver, es porque usted y yo hemos dejado de hacer nuestra parte para que esto ocurra. Porque la voluntad de Dios de concedernos el Espíritu Santo es mayor que el deseo de que cualquier madre tiene endar un buen regalo a su hijo (Mateo 6: 25-34; 7: 7-11). ¿Qué me dices?

(Este artículo es una paráfrasis de las páginas 15 y 16 del libro El Verdadero Reavivamiento de Elena de White)

Por: Valdeci junior