Mateo 27: 51-53 nos dice que, con ocasión de la muerte de Jesús, «Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron; y se abrieron los sepulcros, y muchos cuerpos de santos que habían dormido, se levantaron; y saliendo de los sepulcros, después de la resurrección de él, vinieron a la santa ciudad, y aparecieron a muchos.» Algunos de los muertos, como el hijo de la sunamita (2Rs 4: 18-37), la hija de Jairo (Mt 9: 23-26), el hijo de la viuda de Naim (Lc 7: 11-17) y Lázaro (Jn 11: 146), ya habían sido resucitados antes de la muerte y resurrección de Jesús. Estos, sin embargo, no fueron glorificados y ni recibieron el don de la inmortalidad al ser resucitados.
Cristo mismo había declarado ser Él «la resurrección y la vida» (Jn 11:25, 10:17 y 18) y tener poder para conceder la «vida eterna» a todos los que en él crean (Jn 3: 14-16, 5: 24-29; 17: 2). El poder de Cristo sobre la muerte se evidenció no sólo en su propia resurrección, como «las primicias de los que duermen» (1Co 15:20 y 23), sino también en la resurrección de un grupo de santos que resucitó con Él Mt 27: 51-53). Los líderes judíos habían sobornado a los guardias para negar la resurrección de Jesús (Mt 28: 11-15), pero esos santos resucitados «entraron» en Jerusalén «y aparecieron a muchos» (Mt 27:53) como testigos auténticos de la resurrección de Cristo y de su poder sobre la muerte (ver Ap. 1:18).
El texto bíblico no entra en detalles acerca del futuro de aquellos que resucitaron con Jesús. Pero, si se consideran como los primeros frutos (ver Éx. 23:16, 34:22 y 26, Lv 23: 9-14) de los salvos que resucitarán incorruptibles con ocasión de la segunda venida de Cristo (1 Cor. 15:51) -55), entonces ellos sólo pueden haber sido resucitados también incorruptibles para recibir el galardón de la vida eterna. En su comentario sobre Mateo 27:53, Jamieson, Fausset y Brown declaran que «esta fue una resurrección una vez por todas, para la vida eterna; y por lo tanto, no hay lugar a dudas de que eran para la gloria con su Señor como espléndidos trofeos de su victoria sobre la muerte» (Commentary on the Whole Bible, Grand Rapids, MI: Zondervan, 1961, p. 948).
Alberto R. Timm (a través de Centro White)
Nota: Con respecto a este evento, Ellen G. White escribió:
«Cuando Jesús, pendiente de la cruz, exclamó: “Consumado es,” las peñas se hendieron, tembló la tierra y se abrieron algunas tumbas. Al resurgir él triunfante de la muerte y del sepulcro, mientras la tierra se tambaleaba y los fulgores del cielo brillaban sobre el sagrado lugar, algunos de los justos muertos, obedientes a su llamamiento, salieron de los sepulcros como testigos de que Cristo había resucitado. Aquellos favorecidos santos salieron glorificados. Eran santos escogidos de todas las épocas, desde la creación hasta los días de Cristo. De modo que mientras los príncipes judíos procuraban ocultar la resurrección de Cristo, hizo Dios levantar de sus tumbas cierto número de santos para atestiguar que Jesús había resucitado y proclamar su gloria […] Los que salieron de los sepulcros cuando resucitó Jesús, se aparecieron a muchos, diciéndoles que ya estaba cumplido el sacrificio por el hombre; que Jesús, a quien los judíos crucificaran, había resucitado de entre los muertos, y en comprobación de sus palabras, declaraban: “Nosotros fuimos resucitados con él.” Atestiguaban que por el formidable poder de Jesús habían salido de sus sepulcros. A pesar de los falsos rumores que se propagaron, ni Satanás ni sus ángeles ni los príncipes de los sacerdotes lograron ocultar la resurrección de Jesús, porque los santos resucitados divulgaron la maravillosa y alegre nueva. También Jesús se apareció a sus entristecidos discípulos, disipando sus temores e infundiéndoles jubilosa alegría.[…] Después de bendecir Jesús a sus discípulos, separóse de ellos y ascendió a los cielos seguido de numerosos cautivos libertados cuando él resucitó. Acompañábale una numerosísima hueste celestial, mientras una innumerable cohorte de ángeles esperaba su llegada en el cielo. Primeros Escritos, p. 190.
ENCONTRES ESTAS CITAS AL RESPECTO
Al resucitar Cristo, sacó de la tumba una multitud de cautivos. El terremoto ocurrido en ocasión de su muerte había abierto sus tumbas, y cuando él resucitó salieron con él. Eran aquellos que habían sido colaboradores con Dios y que, a costa de su vida, habían dado testimonio de la verdad. Ahora iban a ser testigos de Aquel que los había resucitado. DTG 730-1
Durante su ministerio, Jesús había dado la vida a algunos muertos. Había resucitado al hijo de la viuda de Naín, a la hija del príncipe y a Lázaro. Pero éstos no fueron revestidos de inmortalidad. Después de haber sido resucitados, estaban todavía sujetos a la muerte. Pero los que salieron de la tumba en ocasión de la resurrección de Cristo fueron resucitados para vida eterna. Ascendieron con él como trofeos de su victoria sobre la muerte y el sepulcro. Estos, dijo Cristo, no son ya cautivos de Satanás; los he redimido. Los he traído de la tumba como primicias de mi poder, para que estén conmigo donde yo esté y no vean nunca más la muerte ni experimenten dolor. DTG 730-2
Estos entraron en la ciudad y aparecieron a muchos declarando: Cristo ha resucitado de los muertos, y nosotros hemos resucitado con él. Así fué inmortalizada la sagrada verdad de la resurrección. Los santos resucitados atestiguaron la verdad de las palabras: “Tus muertos vivirán; junto con mi cuerpo muerto resucitarán.” Su resurrección ilustró el cumplimiento de la profecía: “¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío, cual rocío de hortalizas; y la tierra echará los muertos.” DTG 730-3
Pero Cristo si llevo junto con ÉL a los cielos a los resucitados, aunque la Biblia no dice cuantos fueron
Yo si, creo con certeza a la luz de la biblia que Cristo, resucitó a esos hombres, para llevárselo al cielo como trofeo de su victoria en la cruz, como garantía de su poder para levantar de la tumba a todos los que creyeran en sus méritos y gracia salvadora. El profeta Isaías profetizo esa obra de Cristo, también el salmista David, corroborado por el apóstol pablo lo confirma:
Isa 61:1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ha ungido Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel.
Luc 4:17 Y le fue dado el libro del profeta Isaías. Y abriendo el libro, halló el lugar donde estaba escrito:
Luc 4:18 El Espíritu del Señor está sobre mí: Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres: Me ha enviado para sanar a los quebrantados de corazón: Para predicar libertad a los cautivos: Y a los ciegos vista: Para poner en libertad a los quebrantados:
se puede notar que Isaías hablo, de libertad a los cautivos, tantos del pecado como cautivos de la tumba, que ha sido la carcel de satanas despues que entro el pecado al mundo.
el profeta Isaias lo comenta en el capitulo 14, donde habla de Lucifer o satanas, y de su carcel que es la tumba, donde tiene cautivos a los hombres:
Isa 14:13 Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo, en lo alto junto a las estrellas de Dios levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte;
Isa 14:14 Sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.
Isa 14:15 Pero tú derribado serás hasta el infierno, a los lados del abismo.
Isa 14:16 Los que te vean, te observarán, te contemplarán, diciendo: ¿Es éste aquel varón que hacía temblar la tierra, que trastornaba los reinos;
Isa 14:17 que puso el mundo como un desierto, que asoló sus ciudades; que a sus presos nunca abrió la cárcel?
Isa 14:18 Todos los reyes de las naciones, todos ellos yacen con honra cada uno en su propia casa o tumba.
Isa 14:19 Pero tú has sido echado de tu sepulcro como vástago abominable, como ropa de muertos atravesados a espada, que descienden hasta las piedras de la fosa; como un cadáver pisoteado.
Isa 14:20 No serás contado con ellos en la sepultura; porque tú destruiste tu tierra, mataste tu pueblo. No será nombrada para siempre la simiente de los malhechores.
Entonces Cristo vino a libertar a los cautivos del pecado, y a libertarlos de la consecuencia del pecado que es la muerte:
El salmista David lo profetizo: Salmos 68:18 Subiste a lo alto, cautivaste la cautividad, tomaste dones para los hombres.
Y el Apóstol Pablo lo corrobora en la Carta a los Efesios:
Efe 4:7 Pero a cada uno de nosotros es dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo.
Efe 4:8 Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, y dio dones a los hombres.
esos cautivos son los presos libertados de la tumba cuando Cristo resucito de la tumba, se les llama los presos de Esperanza según el profeta Zacarias: Zac 9:11 Y tú también por la sangre de tu pacto serás salva; yo he sacado a tus presos de la cisterna en la que no hay agua.
Zac 9:12 Volveos a la fortaleza, oh prisioneros de esperanza; hoy también os anuncio que os restauraré el doble.
Efe 4:9 (Ahora, que Él subió, ¿Qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra?
Efe 4:10 El que descendió, es el mismo que también subió sobre todos los cielos para llenar todas las cosas.)
Efe 4:11 Y Él mismo dio a unos, apóstoles; y a unos, profetas; y a unos, evangelistas; y a unos, pastores y maestros;
Efe 4:12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.
podemos observar en estos textos arriba mencionados, que Cristo ascendió a los cielos, y se llevo cautiva a la cautividad, y luego dio dones, o sea, cuando Cristo sube al cielo el derrama o envía El Espíritu Santo, que capacito a los discípulos suyos con Dones espirituales.
Es mi Humilde aporte sobre este tema, Dios les bendiga, y el señor Jesucristo les de entendimiento en todo.
Se puede decir que fueron los 144,000 que anunciaron el mensaje de Cristo y poco despues los mataron.
Nomas comentario, segun estudio propio .
(Primicias de Dios)
(Seguian a Jesús a donde quiera que iva)
(Encontrados Santos delante de Dios)
Asi mi hermano, estaba meditando en el tema y segun el texto ariginal segun 1 Corintios 15:23 dice «El mesias es la primicia, despues todos los que pertenecen al Mesias en el momento de su venida» .
Tomando el texto original, segun Hechos 1 >>>
Las evidecias que fueron escritas de Jesús, fueron que el velo del templo se rasgo , las rocas se partieron, y muchas mas que el apostol Juan dijo que en (Juan 21:25).
Que no fueron escritas, pero que existieron muchas mas.
Bueno, el libro de Hechos 1:9 .
Dice que Él osea Jesús .
Mas no dijo : «Ellos».
En esa palabra se diferencia que solo Jesús subió al cielo, y los demas solo fueron una muestra de que Jesús tiene poder de dar vida a las personas.
Y si notamos las personas fueron a la ciudad de Jerusalén y predicaban (Buenas nuevas), a los demas que Jesús los habia resucitado.
Era una evidencia que nadie podia negarla, por eso los falsos maestros de la ley le pagaron a los oficiales paramentirle a las personas.
yo personalmente no creo que fueron llevados al cielo porque no hay ninguna evidencia escrita en la biblia sobre esto. ellos se fueron en la ciudad. no podemos añadir ni quitar de la biblia segun nos guste. son interpretaciones que no deberian ponerse en estos estudios.
Amen! Creo exactamente lo mismo mi hermano, estas personas resucitado como plan de Dios «de que después de la muerte hay vida», pero no resucitado con cuerpo glorificado, porque si haci fuere, entonces ya tendría lugar el «comienzo del juicio para algunos. Digo mas estos tipos de pasajes biblicos nos enseñan a nosotros de que Dios permitió que sucediera esto para demostrarle con hechos visibles a los judíos que son su puebo lo que Cristo ya había enseñado, «que el El había vida», pero lejos están de especular nosotros mismos si fue verdad o no lo que sucedió, o si ellos ascendieron con Jesús como huested celestiales, o que fueron resucitados en cuerpo de gloria, creo que nos tenemos que quedar con el discernimiento que el Espíritu Santo nos da sobre esta escritura. Bendiciones mis amados.
Gloria a Dios por Jesucristo a tra es de su muerte nos salvo ynos dio vida eterna gracias espritu santo te amamo el gue cre em mi aungue este muerto Vivira aleluya
Las personas que fueron resucitadas por Jesús, no fueron resucitadas para ser eternas, sino para tener otra oportunidad en la vida. Resucitar para tener vida eterna es virtud únicamente de Jesús.