Los apócrifos que aparecen en el AT de algunas Biblias no son parte del canon bíblico.
Los apócrifos no concuerdan con los libros de Moisés.
Cristo no cita ninguna porción de los apócrifos.
Estos libros fueron compuestos en el período intertestamentario, entre los primeros doscientos años antes de Cristo.
Fueron incluidos en las versiones católicas a partir del concilio de Trento (1546).
Los apócrifos difieren de la Biblia.
La comunidad judía rechaza los textos apócrifos. El AT hebreo no reconoce estos libros los cuales fueron incluidos por la iglesia Católica a partir del concilio de Trento.
DIOS NO CAMBIA, Y SU PALABRA TAMPOCO.
“He entendido que todo lo que Dios hace será perpetuo; sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres. Eclesiastés 3:14.”
“ Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos». Hebreos 13:8.
Por Ernesto García, lic. en Teología. UNAC.
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