Guía de Estudio del libro «Cristo en su Santuario» – EGW

La doctrina del santuario celestial es una de las enseñanzas más profundas y distintivas dentro de la fe Adventista del Séptimo Día. Esta verdad, señalada como “el fundamento de nuestra fe” por Elena de White, enfoca la atención de los creyentes en el papel de Jesucristo como intercesor y Sumo Sacerdote en el cielo. A lo largo de los años, esta enseñanza ha proporcionado una perspectiva única sobre el ministerio de Cristo y la obra de expiación, especialmente en tiempos de crisis teológica.

Uno de los eventos más significativos en la historia adventista fue el cumplimiento de la profecía de los 2,300 días, mencionada en Daniel 8:14, que fue un pilar en el despertar adventista de los años 1830 y 1840. Los primeros adventistas creyeron inicialmente que esta profecía indicaba que la purificación del santuario representaba la purificación de la Tierra, y que Cristo regresaría en 1844. Sin embargo, cuando la fecha pasó sin el regreso del Señor, los creyentes experimentaron una gran desilusión.

Después del chasco de 1844, Hiram Edson, un ferviente creyente, recibió lo que describió como una revelación en la que entendió que, en lugar de venir a la Tierra, Cristo había entrado en el Lugar Santísimo del Santuario celestial. Esta nueva comprensión fue un momento decisivo, ya que dirigió el estudio hacia una comprensión más profunda de los eventos profetizados. Junto a otros estudiosos, como el Dr. F. B. Hahn y el maestro O. R. L. Crosier, Edson profundizó en los pasajes de la Epístola a los Hebreos y otros textos bíblicos, concluyendo que el santuario que debía ser purificado estaba en el cielo, no en la Tierra.